El Rey está de pie

Independiente vuelve al fútbol grande de la Argentina: venció en una verdadera final a Huracán y ascendió a primera división. Se terminó la pesadilla que duró menos de un año.

Publicada: 11/06/2014 18:11:42

Lecturas: 2590

Pellízcate. Desperate, hincha de Independiente. Es una realidad: el Rojo ascendió a la máxima categoría y, de a poco, las cosas van volviendo a la normalidad. Una de las dos instituciones de la Argentina más reconocidas a nivel mundial recuperó su lugar en primera división, de donde jamás se tendría que haber ido.

No fue fácil. Luego de estar casi un año luchando contra viento y marea en la B Nacional tuvo que disputar un partido desempate frente a Huracán por el tercer ascenso. Eran noventa minutos a matar ó morir, aunque muchos daban por muerto al conjunto de Avellaneda tras el empate ante Patronato.

En la primera etapa se estudiaron. Ninguno se animaba a arriesgar más de la cuenta. El Globo trataba de inquietar pero Independiente era más punzante de contra. Y así fue como llegó el primer gol: Matías Pisano encaró a Alejandro Capurro, lo dejó en el camino con un movimiento, su remate lo tapó Marcos Díaz y en el rebote Martín Zapata definió al palo derecho.

El complemento fue todo del elenco de Parque Patricios. Presionó permanentemente en tres cuartos de cancha pero Leandro Caruso no estuvo preciso. A los 29 minutos el árbitro Diego Ceballos anuló lo que podría haber significado el empate de Huracán (Diego Rodríguez se quedó parado tras la decisión del árbitro) cobrando un fuera de juego que no existió.

Finalmente, el pleito se liquidó con una habilitación del recientemente ingresado Hernán Fredes para la entrada de Francisco Pizzini, quien le ganó la posición a Díaz y marcó el segundo a los 41 minutos.

Se terminó la historia. Una institución que ya sabe lo que es ganar siete Libertadores, tres Interamericanas, dos Intercontinentales, dos Supercopas, una Recopa y una Sudamericana conoció una nueva experiencia y a partir de agosto se volverá a codear con viejos conocidos.

Pablo Rovito