Solo Ascenso | Opinión

Ya se palpita el clásico tucumano

Martín Soto

Publicada: 27/08/2010 00:00:00

Quizás la pelota no dobló cuando tenía que hacerlo y eso lo evitó durante algún tiempo. Y sí, las idas y vueltas del fútbol hicieron que los dos tomaran caminos de diferentes alturas los últimos años y no permitió ese cruce que acelera tantos corazones y que hace desaparecer tantas uñas en las gradas. Sin embargo, tal vez fue el destino quien la mató con el pecho, la puso en el piso e indicó que ya era hora. El clásico tucumano vuelve a jugarse después de casi cinco años y desde que se sorteó el fixture del Nacional B, en la provincia ya no se habla de otra cosa.

“Ya falta menos para la fecha 13”, es el comentario que más se escucha en las calles y en los bares de la provincia, semana a semana. Y no es para menos, desde aquel domingo 26 de febrero de 2006 cuando por el Torneo Argentino A igualaron sin goles en el Estadio Monumental, Santos y Decanos tomaron rumbos diferentes, enriquecieron más sus abundantes historias, pero dejaron a miles de hinchas contenidos de ese partido especial.

Este clásico comenzó a rodar oficialmente allá por 1917, cuando se puso en juego la Copa Leandro Nicéforo Alem. Ese encuentro se disputó en tierras Santas, y terminó igualado 2 a 2. Desde allí a la fecha, pasaron más de 50 cruces entre Atlético y San Martín con resultados para todos los gustos.

Este 2010 encuentra a los de 25 de Mayo y Chile y a los de Ciudadela en un mismo carril, luchando palmo a palmo, avanzando hacia un mismo objetivo, con armas similares y con el aliento de siempre de sus hinchadas, presas de una pasión que sólo entienden los que viven en Tucumán.

Se sabe que la fecha 13 será el momento señalado para un nuevo cruce, quizás una revancha para algunos. La Ciudadela será testigo de una nueva edición del clásico más importante de la provincia con todo el color y el calor del fútbol tucumano. Donde cada gol y cada atajada quedarán en la memoria convirtiendo en ídolos a algunos gladiadores. Mientras que cada disparo desviado y cada error cometido, pesará en las almas de los hinchas durante mucho tiempo.

Aún falta camino por recorrer para ese encuentro, pero los corazones ya laten más fuertes semana a semana. Y sí, ese partido será aparte, por el todo o nada. El que gane, será el “dueño” de Tucumán durante los próximos meses. El que caiga, tendrá que hacerse fuerte hasta el desquite. Ya falta menos, a seguir contando las fechas…

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