El Bohemio dio un paso en falso y cayó en Caballito

El equipo de Mauricio Giganti volvió a bajar el rendimiento y fue derrotado con justicia por 2-0 ante Ferro. Tras tres juegos sin triunfos, cayó de la zona de Reducido.

Publicada: 14/05/2023 19:21:33

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Atlanta visitó a Ferro en Caballito buscando levantar su producción numérica, dado que si bien no había tenido partidos flojos, acumulaba dos empates consecutivos y comenzaba a poner en duda su posición en la zona de pelea por un ascenso. Sin embargo, el elenco local lo superó desde el principio hasta el final y con dos golpes en momentos justos consiguió llevarse los tres puntos.

El partido comenzó con un Ferro muy atento, que puso a trabajar a Sumavil dos veces antes de, a los siete minutos, tener un penal producto de una infracción de Aguirre en la que toda la defensa Bohemia reclamó falta en ataque, pero el juez no dudó. Alexander Díaz ejecutó el penal y consiguió poner el 1-0 tras vencer la resistencia de un Sumavil que adivinó la dirección del remate, pero no pudo con la potencia.

Pese a que tuvo todo el primer tiempo para ir a buscar la igualdad, el equipo de Mauricio Giganti no logró nunca poner en riesgo el triunfo del local. Ferro dominó y tuvo más oportunidades para ponerse en ventaja que las que tuvo la visita para igualar. Apenas un par de centros mal ejecutados y algún remate lejano fue toda la producción de Atalanta en ataque en un primer tiempo para el olvido.

En el complemento, el equipo de Villa Crespo salió absolutamente dormido y el local pudo aumentar la ventaja con rapidez. Primero no pudo Palacio con Sumavil, pero luego Jonathan Herrera tomó el rebote tras el mano a mano y no perdonó. Ferro se ponía 2-0 en apenas 2 minutos del complemento, y de no haber sido por la virtud del arquero, Caballito hubiera goleado antes de los 15 del segundo tiempo.

Luego Atlanta mostró su mejor cara, enfocando en Galeano el 100% de sus actividades ofensivas serias. El equipo de Villa Crespo pudo haber descontado y tuvo dos situaciones muy claras: un mano a mano de Mazzola, que quedó con la pelota picando y quiso definir sutilmente a un costado y el arquero le adivinó; la segunda fue de Olivera que, a la salida de una pelota parada, recibió un rebote solo con tiempo y en el área chica, pero se apuró con un cabezazo que le salió el medio del arco, justo donde estaba parado el arquero local.

Ferro de contra pudo haber liquidado el pleito y Atlanta, buscando en ofensiva, sólo chocó contra su propia frustración e ineficacia. Poco para rescatar en el equipo de Mauricio Giganti, sólo la conducción de Galeano, a quien encima pierde para el duelo con Gimnasia de Jujuy, porque recibió su quinta amarilla, y la incansable entrega de un Sumavil que permitió que el resultado fuera decoroso.

Mariano Perusso