Histórico

El conjunto de San Ramón venció como local 2-1 a Libertad de Concordia y selló su ascenso al Federal A. Será el segundo representante de Santiago en la tercera categoría.

Publicada: 15/02/2015 22:16:20

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El Fortinero tocó el cielo con las manos. Tras haber igualado sin goles la primera final frente a Libertad de Concordia, Vélez definió en su casa y se impuso 2-1 con los goles de Pablo Russo en contra y de Luis Leguizamón. Así, el elenco de San Ramón logró por primera vez en su historia el ascenso al Federal A y será el segundo representante de Santiago en el certamen tras la participación de Mitre.

Todo esfuerzo tiene su premio. Fundado el 28 de agosto de 1923, el club santiagueño vivió 91 años con la ilusión de estar entre los grandes del país y con ser protagonista no sólo del fútbol de su provincia sino también del país. El 15 de febrero de 2015 quedará marcado a fuego en la institución porque aquel viejo anhelo se hizo realidad y Vélez diputará el Federal A.

El mérito es aún mayor para el Fortinero. Si se retrocede sólo un año atrás, el presente de Vélez sería impensado. El elenco de San Ramón comenzó a disputar los torneos del interior en 2010 y recién a mediados de 2014 fue invitado a participar del Federal B, oportunidad que no desaprovechó y tras una magnífica campaña concretó el ansiado ascenso.

Luego de un comienzo difícil, el equipo de Santiago del Estero supo sobreponerse a la adversidad, hilvanó victorias importantes y se hizo fuerte en el mano a mano, en donde superó las tres llaves que lo llevaron a la consagración. En la final, disputada en San Ramón, sacó chapa de campeón ante el duro Libertad de Concordia y lo venció con claridad por 2-1.

El 0-0 del partido de ida dejó la llave abierta y la posibilidad al Fortinero de sellar el ascenso en su casa y ante su gente. Ante esta magnífica oportunidad no falló y se impuso con justicia sobre su rival. El convencimiento propio se notó de entrada y, a los 22 minutos, Matiás Noriega remató un balón que se desvió en Pablo Russo y se transformó en la primera sonrisa de la tarde.

La tranquilidad de estar por encima en el marcador estuvo presente, pero la sensación de que la diferencia era muy poca también permaneció latente. Sin embargo, Luis Leguizamón se encargó de sepultar cualquier miedo para estampar el 2-0 a los 26 del complemento. A nueve del final, Jorge Echenause descontó, pero de poco sirvió porque los de Concordia no volvieron a lastimar y Vélez, por fin, pudo gritar ¡campeón!.

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