La fiesta fue mía

Chicago le ganó 1-0 a Sarmiento en Mataderos con gol de Orfano y se prendió una vez más en la pelea por el ascenso a la Superliga. El domingo irá por la hazaña en Adrogué.

Publicada: 15/04/2019 17:37:17

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Con actitud, con garra, con sacrificio. A lo Chicago, mejor dicho. El equipo de Walter Perazzo se quedó con un triunfo de aquellos en Mataderos porque no solo bajó a Sarmiento, líder de la B Nacional junto a Arsenal, sino que también extendió el suspenso hasta la última fecha y se prendió en la pelea por el ascenso a la Superliga.

Lo sufrió en un principio con la jerarquía que tiene en el ataque el conjunto de Junín, que de hecho lo perdonó dos veces; primero con un tiro de Villalba que salvó Silva y después con otro de Miracco con el arco a su merced y el palo devolvió. Pero el Torito se repuso y se agrandó en su casa.

De la mano del Pitu González y Melo, fue ganando terreno. Y con un tiro libre del Loco que un defensor de la visita salvó en la línea, llegó la apertura del marcador. Allí apareció Achucarro quien asistió a Orfano para que este empuje la pelota al fondo de la red y delire todo el República de Mataderos.

Llegó el complemento y la ventaja a favor. El Verde, con la necesidad a cuestas, se animó y buscó la igualdad y casi la consigue. Ariel Penel vio penal de Silva a Miracco y Orsini se hizo cargo del mismo. Pero el 1 del Torito se hizo gigante y lo tapó. Y le dio vida a un equipo que le cuesta aguantar los partidos.

Sin embargo, la versión del local en los últimos minutos fue diferente a todo el torneo. Manejó la pelota y los tiempos, hizo de Achucarro su abanderado y desde el fondo sacó todo, con el ingreso de Sánchez Sotelo y Gomito aprovechó los espacios y hasta pudo liquidarlo. Pero con el de Orfano le alcalzó para que la fiesta fuera toda verdinegra.

Ahora le toca ir a Adrogué para otra final. Para dar un paso más en su ilusión por subir a Primera una vez más, pero no será fácil. Con una oreja en Junín y otra en el Bajo Núñez, será difícil frente a Brown claro está pero no imposible, porque para Chicago todo es posible y sabe de hazañas…