Sueña con el Reducido

A pesar de arrancar perdiendo, Luján lo pudo dar vuelta 3-1 con los goles de Guzmán, De la Cuesta y Carneiro en el debut del técnico Abel Oroná.

Publicada: 21/05/2017 18:00:44

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Era una de las últimas chances que tenía Luján para mantenerse vivo en la pelea por el Reducido. Enfrente había un rival que quería acercarse al segundo puesto de la tabla. Por eso, era un duelo más que interesante en el Municipal, con el aditamento del estreno de Abel Oroná en el banco de suplentes local. Y con un buen primer tiempo, el Lujanero venció 3-1 a Midland para seguir con chances de meterse entre los nueve mejores del campeonato de la Primera C.

Metido, concentrado y ordenado. Esas fueron las características que mostró el Lujanero, ahora dirigido por Oroná. Y se pudo recuperar rápido de los contratiempos. Es que a los dos minutos arrancó en desventaja: gran pase de Leandro Scornaienchi a las espaldas de Mauro Rubira, Gutiérrez la metió al medio y Milton Giménez la empujó al fondo del arco a pesar del esfuerzo de Franco Rodríguez, que se estiró con todo.

Aunque suene raro, tal vez el 0-1 le vino bien al Lujanero. Porque salió con todo a revertir la historia. Después de algunas aproximaciones con profundidad (un cabezazo de Minervino y un par de centros peligrosos), llegó el empate. Imanol Varela aprovechó las dudas de la última línea de Midland, la robó y cuando se metió dentro del área fue derribado por un agarrón. El árbitro no sólo marcó el penal correspondiente sino que también expulsó a Andrés Siena en forma exagerada. Con un remate al palo izquierdo, Andrés Guzmán acomodó la historia.

Luján era empuje y algunos movimientos interesantes, más allá de las complicaciones del terreno de juego en mal estado tras el diluvio ante San Martín de Burzaco. Cuatro minutos después, una gran contra manejada por Varela desató el festejo. El 9 abrió para Federico Carneiro, que se metió dentro del área, definió ante la salida de Macilla y el rebote le quedó a Agustín De la Cuesta, que sólo la tuvo que empujar al fondo del arco.

El local era simple. Achicaba espacios entre sus líneas y salía disparado con la velocidad de De la Cuesta o Varela, más Carneiro que se sumaba rápidamente a los hombres de ataque y las subidas esporádicas y medidas de Mauro Rubira. Así, estaba al borde del tercero. Varela (la figura de la primera etapa) ganó en velocidad por la derecha, metió el centro y Guzmán se la llevó por delante cuando el arquero llegaba a montear. En la última, el 9 enganchó para su pierna derecha dentro del área y sacó un violento remate que encontró bien parado al arquero.

En el complemento, el Lujanero bajó los decibeles y el partido se hizo ordinario. Eso, por supuesto, terminó favoreciendo al Funebrero que, con un hombre menos, empezó a llevar el encuentro donde más le convenía. Así, con un par de pelotas paradas llevó zozobras al arco de Lescano, aunque le costaba progresar con claridad y juego asociado.

Pero de contra el conjunto de Oroná sabía que podía liquidarlo. En una buena subida de De la Cuesta, el zurdo se tomó un tiempo más y apareció la pierna del defensor para cruzar un remate que podría haber sido peligroso. Después, De Hoyos la manejó mal cuando tenían superioridad numérica. En un centro de Castillo, la bajó De Hoyos de cabeza pero Celín despejó justo cuando entraba Carneiro.

Sin el vértigo de la primera etapa, el Lujanero puso el partido en el freezer e intentó tocar por abajo en un terreno que, con las pisadas y el paso del tiempo, se volvió imposible. Sin embargo, terminó sufriendo porque Midland tuvo dos chances clarísimas con sendas pelotas paradas. Primero Maximiliano Torres González quedó solo dentro del área chica y Rodríguez, primero, logró tapar el remate y después desviar al tiro de esquina. Y en la última el cabezazo se fue por arriba del travesaño cuando Lescano salía mal. Pero la tranquilidad llegó con el tercero de Carneiro.