De visitante en su propia cancha

El Lobo Rojo enfrentará este domingo a Central Ballester, que hará de local en el Ciudad de San Miguel. Mirá los antecedentes de equipos que cedieron la localía en casa.

Publicada: 19/09/2018 12:36:32

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Este domingo, Juventud Unida "visitará" a Central Ballester, pero el partido se jugará en la cancha del Lobo Rojo, donde el Canalla hará de local durante esta temporada. Será un duelo particular para los de San Miguel, que deberán usar el otro vestuario y verán, en las tribunas en las que habitualmente está su gente, a hinchas rivales.

Será una particularidad que tiene algunos antecedentes en el fútbol argentino. Por cuestiones de infraestructura, es algo más común en el ascenso, pero también ocurrió en la Primera División y hasta sucedió en un superclásico.

En la Primera D es algo medianamente común, y en el último tiempo les pasó mucho a Liniers. La Topadora le presta el estadio a varios equipos, y debió visitar su cancha para medirse con Centro Español en 2015 y con Yupanqui en 2016. Esa misma temporada igualó en uno con Deportivo Paraguayo en Villegas. Este año venció 1-0 a Paraguayo también en su casa.

Sportivo Barracas, que juega en la Primera C, es otro de los que no tiene estadio propio y necesita jugar en cancha ajena. Si bien un tiempo hizo de local en Atlanta, también jugó muchos partidos en cancha de Sportivo Italiano. Allí enfrentó en diciembre de 2016 al Tano en un empate sin goles.

En 2004, el Tano fue protagonista de una situación similar, pero de la vereda de enfrente. En esa ocasión enfrentó a Platense, en condición de local, en Vicente López. El Calamar, en su época en Primera, también

Otro antecedente de igualdad sin goles es en Primera División, cuando Racing le prestó la cancha a Arsenal, y la Academia fue visitante. El otro equipo de Avellaneda también sufrió una situación similar cuando recibió a Huracán en el Tomás Adolfo Ducó. Ese día, los hinchas de Independiente se ubicaron en la popular visitante, pero ocuparon además las plateas.

Un caso icónico fue el superclásico de 1984. En esa ocasión, Boca Juniors jugó de local un Superclásico en el Monumental. Fue un caso particular porque el equipo de la Ribera tenía su estadio clausurado, mientras que el Millonario cedió sin costo el estadio para el encuentro entre ambos. En esa oportunidad, River usó el vestuario local y sus hinchas estuvieron en la tribuna local, pero la voz del estadio y los alcanza pelotas eran del Xeneize.

Mariano Perusso