Se durmió en los laureles

En tiempo cumplido, el Pincha logró ponerse arriba en el marcador y parecía que se llevaba un triunfo clave de Villa Lynch. En la siguiente jugada, el local puso el 1-1 final.

Publicada: 08/04/2019 17:41:49

Lecturas: 710

Estudiantes no tuvo un gran tarde en su visita a la UAI Urquiza. Fue un partido en el que ninguno de los dos destacó por el buen juego, pero más allá de eso, el Pincha había logrado ponerse en ventaja cuando se moría el partido gracias al gol de Sayavedra. En tiempo de descuento, y apenas sacó del medio, el local encontró la igualdad que le hace justicia al trámite del juego, pero le duele y mucho al Matador.

Los dos necesitaban el triunfo, pero también a los dos les dolía mucho perder. No podían darse ese lujo, y seguir sumando, al final, no era tan grave. Más allá de eso, Estudiantes sabe lo difíciles que son las rectas finales del campeonato, y quiere resolver el ascenso cuanto antes. Por eso siempre fue el que tuvo la inicativa y el que buscó más el arco rival.

Más allá de eso, en el primer tiempo, no hubo llegadas concretas más allá de un pase filtrado para Garay que Pietrobono ahogó bien antes de que el volante llegara siguiera a tomar contacto con la pelota. El empate, al cierre del juego, era lógico ante la falta de precisión en los minutos finales.

Diego Martínez, que había tenido que meter mano en el primer tiempo por la lesión de Leonel González, empezó a mover el banco, buscando, en las dos variantes que le restaban, las respuestas que no encontraba en la cancha. Antes de los 10 de la segunda mitad, el DT sacó a Fernando Joao por Emanuel Ibáñez. No iban 20, y el entrenador ya había agotado variantes con el ingreso de Diego Figueroa por Nahuel Benítez.

Pero nada lograba romper el cero en el marcador. Hasta que, en el final, el Pincha encontró el camino. Primero avisó con un disparo de Ruiz Gómez, que rechazó el arquero y luego Figueroa no pudo empujarla. Ya en tiempo cumplido, Sayavedra clavó un disparo desde afuera del área al ángulo y parecía que le daba la victoria al Pincha. Al mismo tiempo, Flandria le convertía a Barracas en un minuto que parecía perfecto para Caseros.

Pero el Matador se durmió en los laureles. La UAI sacó y, perdido por perdido, fue a buscar el empate. Un centro, dos cabezazos y el empate, producto del testazo de Leandro Martínez cuando el Pincha casi que seguía festejando una victoria que tenía en el bolsillo. Más allá de eso, consiguió al menos descontarle un punto a Barracas y acercarse al ascenso, que ahora está a siete unidades. El verdadero valor del empate llegará luego del partido de Acassuso con San Telmo el martes.

Mariano Perusso