Primera C | Central Córdoba (Rosario)

Un grande del interior está de festejo

El Charrúa cumple 112 años de vida, y Solo Ascenso preparó esta nota para repasar los mejores momentos de la historia del primer equipo campeón nacional del interior.

Publicada: 20/10/2018 12:33:27

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La historia de Central Córdoba es quizá de las más ricas del fútbol de ascenso. Se trata de un club que cambió mucho de nombre oficial pero siempre mantuvo su estadio en el mismo lugar. Fue el primer equipo del interior en consagrarse campeón de una copa nacional, y su fecha de fundación no está confirmada. Una institución especial, con un pasado riquísimo y un presente que le exige volver a ser lo que supo ser: un grande del interior.



El 20 de octubre es la fecha que se tomó como oficial para identificar el día en que nació el que hoy es conocido como Club Atlético Central Córdoba, pero lo cierto es que el equipo ya había solicitado su afiliación a la Liga Rosarina un año antes. Sin embargo, el primer acta data de un 20 de octubre de 1906, por lo que, al menos oficialmente, el Charrúa cumple hoy 112 años.

Su nombre original era Rosario Rallway Athletic Club, en honor a la empresa ferroviaria para la que trabajaban los fundadores de la institución. Para 1914, su nombre fue cambiado a The Cordoba and Rosario Rallway A. C., al que los hinchas, en español, llamaban Ferrocarril Córdoba y Rosario. Las posteriores deformaciones del nombre lo llevaron a pasar por Club Atlético Ferrocarril Central Córdoba y finalmente Club Atlético Central Córdoba.

El apodo de Charrúa también tiene su costado pintoresco. No responde a ningún indio Charrúa ni a raíces uruguayas. Todo surge de una sátira del periodista Alejandro Berrutti, quien sacó una nota a raíz de una polémica con Claro Arturo Charra, representante del club en la Liga Rosarina. En la publicación, cambió el nombre de Charra por Charrúa para ironizar. La expresión fue rápidamente adoptada por los hinchas y representantes del club, que se llamaron de ahí en adelante a sí mismos “Charrúas”.

Su primer estadio estuvo ubicado en Bulevar Argentino y 25 de Diciembre (hoy Juan Manuel de Rosas). Luego, fue mudado a la manzana que delimitan Juan Manuel de Rosas, 1? de Mayo, Gálvez y Virasoro. Técnicamente, es la misma manzana, sólo que cambió el sentido: antes la cancha iba en sentido norte-sur, y hoy está en sentido este-oeste.



El estadio no tuvo nombre hasta 1969. El 7 de noviembre de ese año se lo bautizó como Gabino Sosa, en honor al futbolista más importante que vistió la camiseta del club. Gabino Sosa jugó 24 años en el Charrúa, desde donde consiguió integrar la Selección Nacional, y fue parte del plantel que logró coronarse en la Copa Beccar Varela.



Si bien Gabino Sosa fue el más importante de los futbolistas que pasaron por Central Córdoba, también hay otros nombres relevantes como el César Delgado, otro hombre de selección que aún hoy forma parte del equipo. También se suman Fabián Cancelarich, Silvio Carrario, Danilo Gerlo, Guillermo Farré, Santiago Raymona, Tomás “Trinche” Carlovich, Leandro Armani, Horacio Ameli y Sergio Almirón, entre otros.

Su primer gran éxito fue la Copa Beccar Varela en 1934, cuando se coronó luego de que se suspendiera por incidentes la final ante Racing en cancha de River Plate. El partido estaba 2-2 y había penal para los Rosarinos. En ese torneo, además de haberse enfrentado a grandes del país, también compitió con Nacional y Peñarol de Uruguay.



Su punto más alto histórico en cuanto a logros deportivos es su etapa en Primera División. El Charrúa logró el ascenso en 1957, tras golear a Quilmes por 3-0 en el Sur y coronarse campeón de la Primera B. Luego de dos temporadas, quedó último en la tabla de promedios y el 22 de noviembre de 1959, tras vencer a Rosario Central de visitante, volvió a la Primera B.

Tras haberse codeado con la elite del fútbol local, Central Córdoba no logró mantener los buenos resultados deportivos, y en 1967, luego de siete temporadas, descendió a la Primera C. Pero en 1973 logró un hecho histórico: una vuelta olímpica ante su gente, en el Gabino Sosa. Fue luego de vencer 2-1 a Argentino de Quilmes y asegurarse el regreso a la Primera B.

Hasta 1991, el Charrúa osciló entre la Primera B (o B Metropolitana) y la Primera C. Pero el 13 de abril de ese año goleó en San Martín a Chacarita por 4-1 y ascendió a la B Nacional. Así, los Rosarinos estaban otra vez a un paso de la máxima categoría del fútbol argentino. Ese sueño estuvo muy cerca de concretarse en 1993, pero Gimnasia y Tiro de Salta le ganó la final del Reducido.

Desde allí, Central Córdoba luchó por volver a ser, pero le costó mucho sostenerse. Pasó a la B Metro, y luego de un fracaso estrepitoso de un gerenciamiento, cayó a la Primera C. Pese a un paso fugaz nuevamente por la tercera categoría, regresó a la quinta división del fútbol nacional, desde donde intenta hoy volver a ser quien supo ser: un grande del interior.

Mariano Perusso

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