Vegetti +10

El delantero del Pirata marcó un triplete para dar vuelta el partido y llevarse tres puntos clave ante Barracas. Fue 3-2, y hasta se dio el lujo de errar un penal.

Publicada: 22/02/2020 19:33:17

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El delantero del Pirata volvió a demostrar su nivel superlativo: marcó un triplete para dar vuelta el partido y llevarse tres puntos claves ante Barracas. Fue 3-2, y eso que erró un penal...

Belgrano parece haber encontrado una racha. El equipo no juega bello ni se convirtió en una fortaleza defensiva, pero parece más entero mentalmente. Seguramente, uno de los aspectos que mejor trabaja Caruso Lombardi, motivador nato. Esta tarde, su fortaleza psicológica se mostró en todo su esplendor.

Es que el Pirata volvió a salir dormido y, como en casi todos los encuentros del torneo, comenzó perdiendo. En un partido de pocas ocasiones claras y a grandes rasgos aburrido, Ramiro López aprovechó la que tuvo y adelantó a Barracas Central a los 21.

Rápido como nunca, los cordobeses reaccionaron: al minuto, Pablo Vegetti aprovechó un error en el fondo y puso el 1-1. Pero Barracas volvió a adelantarse a los 30, gracias a un penal que convirtió Fernando Valenzuela. Belgrano contó también con un penal antes del cierre de la primera etapa, pero Vegetti falló y el arquero se quedó con su disparo.

Parecía el fin de las esperanzas: el Celeste había reaccionado, pero no había alcanzado. Para colmo, su goleador había perdido una chance clara, con lo que eso podía afectarle la cabeza. Quedaban 45 minutos durísimos por delante.

Pero algo habrá hablado Caruso en el complemento que reavivó la llama. Al minuto del complemento, Vegetti ya había puesto el 2-2, y para los 17 había concretado su hat-trick para poner a Belgrano arriba en el marcador por primera vez en el partido.

Caruso fue metiendo mano para cerrar el partido: a la cancha Longo y Vázquez, para ganar contención y no sufrir más. Sobre el final, apuntó a molestar a la defensa local con el ingreso de Estigarribia.

Belgrano lo aguantó, hasta casi el minuto 50, y se llevó una victoria clave. Que vale más que tres puntos, porque se convierte en la inyección anímica que tanto venía necesitando. Además, este triunfo eleva a seis los partidos consecutivos invicto y la ilusión se vuelve a encender.