Un triunfo que ilusiona

El Bohemio bajó al escolta, Almirante Brown, con una gran actuación. Fue 4-0 con dos de Pons, un golazo de Seijas, y otro de Nahuel Peralta (foto) para ser segundo en soledad.

Publicada: 13/05/2017 13:14:54

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Atlanta tenía una visita más que complicada: en casa del escolta, en un cancha donde la última vez que ganó fue en 2005, y tras una muy floja actuación en condición de local. Además, no contaba con su capitán, ni con su goleador, ni con su mayor generador de juego. Y con todo eso, consiguió la goleada más abultada en lo que va del torneo: 4-0 y a soñar.

De entrada, Atlanta aprovechó las fallas del local. No habían alcanzado los cinco minutos cuando Pons aprovechó un rebote que dio el arquero tras una linda combinación entre Peralta y Sánchez por izquierda. El 9 se sacó la mufa de marcar de jugada, ya que desde su regreso sólo había convertido un penal. El Bohemio era más, y controlaba a Almirante que casi no llegó a inquietar a Agustín Gómez.

Sobre los 38, Lucho iba a convertir el segundo. Centro de Seijas cruzado para Pons, que ganó en el área para de cabeza peinarla y colocarla en el segundo palo. Atlanta daba un golpe duro al local, pero knock out llegó pocos minutos después: en el primero de adición. Seijas fue protagonista nuevamente, pero esta vez no lanzó un centro, sino que metió un derechazo de 30 metros que se clavó en el ángulo. Golazo y debut en la red para el ex Estudiantes.

Con ese resultado al término de la primera etapa, parecía que el complemento estaba de más. Para colmo, el arquero local, Mattalía, estaba lesionado y no aguantó, por lo que en el entretiempo Pascutti debió gastar su segundo cambio al poner a Peralta Salinas (en el primer tiempo había puesto a Seguel por Montero). De este modo, sin variantes, y con un 0-3 en contra, poco había para hacer.

Y así fue. En los 45 finales, fue más Atlanta, dominó, no sufrió, y lo liquidó. Promediando la segunda etapa, Pons desbordó por derecha, lanzó el centro para Dorregaray, que definió de derecha. El arquero la tapó, pero Peralta ingresó para puntearla y meter el cuarto. Regreso al gol para el volante, que es uno de los goleadores del equipo.

En los 22 que quedaban, sólo hubo tiempo para que ingresaran Igartúa, Altobelli y Previtalli en el equipo de Duró, que consiguió tres puntos fundamentales, sobre todo desde lo anímico, y pensando en la recta final del torneo. Morón aún parece inalcanzable, pero afianzando este rendimiento, Atlanta será un equipo de temer en el Reducido. Lo que resta saber es cuál es el verdadero: el que fue superior a Platense y a Almirante Brown de visitante o el timorato y desalmado que apenas consiguió un punto ante San Telmo.