Primera Nacional | Arsenal

Una pasión que no tiene barreras

La historia de Carla Giménez y su hija Mía, ciega de nacimiento, a quien le relata los goles del club de Sarandí. Ambas festejaron juntas el gol que le dio el ascenso al Arse.

Publicada: 30/04/2019 18:02:16

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Mía tiene 14 años y padece displasia septo óptica, lo que le afectó el desarrollo de la línea media hasta el cerebro. En su caso, están disminuidas la parte motora, la vista y la parte cognitiva. Su visión es nula, y su capacidad de comprensión es menor a la media, pero nada de eso son frenos a la hora de la pasión. Su madre, Carla Giménez, le inculcó el amor por Arsenal, la lleva a todos lados y le relata los goles.

Carla (34) es hincha de Arsenal desde la adolescencia, y vivió con el club momentos inolvidables. “Cuando ascendió estuve, y me significó todo ese ascenso. Cuando quedé embarazada era obvio que mi hija iba a ser hincha de Arsenal. Y el día que le conté a mi papá fue el día que se inauguró el estadio. Ahí, en el medio de los festejos, tiré la bomba”, recordó en una charla exclusiva con Solo Ascenso.

Y pese a la condición con que nació su hija, le empezó a inculcar el amor por los colores. “De chiquita la llevaba, pero Mía se me asustaba. Y con el paso de los años se fue acostumbrando y la empecé a llevar a todos lados. En Arsenal tengo un grupo de amigos grande y cuando jugamos de visitantes nos juntamos todos a comer y a ver los partidos, y la gorda es partícipe siempre”.

“Mía no es que tiene un desarrollo cognitivo grande. El partido a ella se le cierra en los goles. De nada sirve que le diga ‘jugó bien’ o ‘jugó mal’ si no gritó un gol. Toda la semana había estado diciéndole que Arsenal iba a salir campeón, que íbamos a festejar, le estuve cargando la cabeza. Y en el partido me preguntaba cuándo iba a hacer el gol. Estaba más ansiosa que nosotros”, relató.

Calu, como la conocen todos en el club, continuó: “Y justo en el penal, le dije ‘ahí viene el penal’, y ella se me queda como diciendo ‘¿qué carajo es un penal?’. ¿Cómo se lo represento en una mente abstracta? Entonces le dije ‘ahí va a patear el de Arsenal’. Me senté al lado de ella y lo filmé”.

“Nunca filmé un gol. Pero esta vez me parecía, dije ‘este es el gol del ascenso. Este es el momento que quiero que quede plasmado para siempre’. Me veo gritando y parezco un mono, pero era todo. Ese momento lo quería tener para mí. Y después cuando lo vieron mis amigos me dijeron: ‘Es muy fuerte este video’. Para mí, era un video normal. Un amigo me escribió y me dijo que lo había hecho llorar. Yo lo había subido a Twitter para tenerlo, pero evidentemente a todo el mundo le encantó ese video, le llegó”, comentó.

Cuando el video se empezó a viralizar, ella tenía una sola cosa en su cabeza: “Yo pensaba en la gorda. La miraba y decía ‘qué lindo’. Uno como padre siempre quiere que su hijo lleve los mismos colores y la misma pasión. Y que de repente viva las cosas lindas que yo viví con Arsenal… Ella vivió la Sudamericana, pero era muy chica. Ahora está más grande y lo puede disfrutar más”. Su hija es una personalidad en el Viaducto, todos la conocen, y en cuanto la ven llegar, la ayudan a ubicarla y hasta le compran algo para comer o tomar.

Pero Mía no es de esas personas que cuando viene la mala se borran: “Cuando Arsenal descendió, sentía que se venía el mundo abajo, sentíamos la presión de esa frase de ‘se murió Grondona, se muere Arsenal’”, recordó Carla.

Y algo en el equipo de Rondina les devolvió la esperanza. “Cuando empezó este campeonato, fue como recobrar la identidad del Arse, de un equipo chico y aguerrido. Me volvía el alma el cuerpo. Cuando veía a la gorda en el video, y que la gente lo retweeteaba y todo, dije ‘acá hay algo que traspasa, algo que va más allá, que es el sentimiento’”.

Gracias a su video, Emiliano Méndez, volante central del equipo, se comunicó con ella para agradecerle, y hasta tuvo la posibilidad de dialogar, por medio de una radio, con Sergio Rondina.

Más allá de todo lo que generó, a Carla le importa sólo una cosa: “Cómo le transmití yo la pasión, cómo ella se banca 90 minutos, más la previa, no entendiendo nada, sólo escuchando los ruidos… Es una pasión”.

Ahora Carla va a poder relatarle los goles de su hija en las canchas de Primera División. “Eso es lo más lindo. Me encantaría que vuelvan los visitantes, sería lo más lindo de todo”, cerró, recordando que, cuando se podía, Mía alentó al Arse en las canchas de Racing, Independiente y Argentinos Juniors, entre otras.




Mariano Perusso

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