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Aníbal Biggeri: “Mi continuidad nunca estuvo en duda”Publicada: 18/09/2018 16:50:29
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Hace 87 años, en la localidad de Avellaneda, nacía Julio Humberto Grondona, en el seno de una familia que tenía como principal negocio una ferretería icónica en la zona. Los que saben, dicen que gracias a ese local se creó medio Sarandí. Con un formato de pagos a largo plazo y confianza en el cliente, armaron un imperio que aún hoy permanece en pie.
En ese nido se crío Julio Grondona, quien mostró interés por el fútbol desde chico, lo que lo llevó a jugar en las inferiores de River Plate, Defensores de Belgrano y luego en su propio club, Arsenal de Sarandí. Pero claro, para poder jugar ahí, primerio debió fundar la institución que llevaría desde la nada hasta los primeros planos internacionales.
Julio Grondona fundó el 11 de enero 1956, junto con algunos amigos del barrio, el Arsenal Fútbol Club, tomando el nombre de la reconocida institución londinense. A partir de 1957, Grondona ocupó el puesto de Presidente mientras todavía formaba parte del primer equipo, que por entonces jugaba en la Primera D.
Su gestión trajo inmediatamente buenos resultados para el club que para 1964 ya había logrado dos ascensos y jugaba en la Primera B. Grondona presidió el club hasta 1976, en un total de 19 años de éxitos que lo catapultaron para ocupar ese mismo puesto pero un club histórico de la zona. Si bien ya era también dirigente de Independiente, Julio Grondona asumió en 1976 como Presidente del Rojo, y ahí dejó al Arse.
Tres años como mandamás del club de Avellaneda le bastaron para llegar a la Asociación del Fútbol Argentino, donde se instaló el 6 de abril de 1979 y donde permanecería hasta el 30 de julio 2014, cuando estando en funciones, falleció. Su gestión le permitió acceder también a la vicepresidencia de la FIFA, puesto que ocupó desde el 30 de abril de 1988 hasta el día su deceso.
Pese a que Julio Grondona dejó de tener un vínculo oficial con Arsenal en 1976, su amor por el club que él mismo fundó permaneció tanto en él como en toda su familia, tan es así que sus hijos Humberto y Julio estuvieron siempre ligados al elenco de Sarandí, tanto en lo deportivo como en lo dirigencial. En tanto el estadio lleva su nombre.
Durante su presidencia en la AFA, la selección Argentina salió dos veces campeona del mundo, en los dos únicos títulos mundiales que tiene. Mientras, su querido Arsenal logró un campeonato local y dos internacionales, al ganar la Copa Sudamericana y la Suruga Bank. Como si fuese un espejo de su vida, pocos años después de su fallecimiento, el club del Viaducto descendió a la B Nacional.
A lo largo de su mandato, fue amado y odiado, criticado y alabado. Fue uno de los personajes más controversiales, y a la vez una pieza clave, de la historia del fútbol argentino.
Mariano Perusso
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